Carica papaya es una especie de plantas de la familia de las caricáceas. Su fruto se conoce comúnmente como papaya, papayón, mamón, lechosa, melón de árbol o fruta bomba. La planta de la papaya es un arbusto de 2 a 5 metros de alto, de tallo simple, con hojas grandes, extendidas y con hendiduras. Sus flores son amarillas y están unidas al tronco, del cual salen sus carnosos frutos. El fruto verde inmaduro de la papaya se come generalmente crudo, sin la cáscara y las semillas; puede ser consumido en ensaladas y estofados. Es muy utilizado en la cocina Thai (tailandesa), crudo o cocinado. Posee una cantidad bastante alta de pectina, que se puede usar para elaborar mermeladas. Sus semillas, de color negro, tienen un sabor fuerte, pero son comestibles. A veces, son molidas y usadas como sustituto de la pimienta negra. En algunas zonas de Asia, las hojas jóvenes de la papaya son hervidas y consumidas como si fueran espinaca. Y en varias partes del mundo las hojas sirven para hacer una infusión, similar al té, que se bebe a fin de prevenir la malaria (pero no hay evidencia científica de la eficacia de ese tratamiento). En Cuba, se acostumbra consumir la papaya cuando está madura (se le suele agregar azúcar); para hacer dulces, se emplean las maduras y las “pintonas” (ni verdes ni maduras). La planta de la papaya es originaria de México, donde su uso medicinal es muy frecuente, en especial para problemas digestivos. También se recomienda para dolores de pecho, asma, bronquitis, difteria y problemas pulmonares. La fruta es muy rica en fibra, vitaminas A, C y B, calcio, hierro y fósforo. Está compuesta por un 88% de agua, un 8% de azúcares, y no tiene nada de grasas. Entre sus principales propiedades, se pueden mencionar que es diurética y antioxidante, combate la celulitis, y finalmente tiene propiedades dietéticas y digestivas que contribuyen a hacer perder peso, por lo cual se la incluye en dietas especiales.

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