A continuación, se ofrecen dos ejemplos de menús con los que se puede llevar a cabo la dieta neurobiológica.

Menú 1

Desayuno: café descafeinado con leche descremada o yogur con cereales (1 cucharada de germen de trigo, levadura de cerveza, salvado de avena) y 1 rodaja de pan con gluten, endulzada con miel. Almuerzo: ensalada verde con vegetales de estación; proteínas “blancas” (pollo o pescado). Merienda: igual al desayuno. Media tarde: zumo de limón o manzana. Cena: ensalada de color (tomate, calabaza, zanahoria o leguminosas) de estación; fideos integrales, arroz integral o milanesa de soja. (Si se tienen dificultades para dormir, se puede comer un plátano.)

 

Menú 2

Desayuno: café, té o mate, con edulcorante, 1 grisín de gluten. Media mañana: 1 vaso de 1/2 limón exprimido, con edulcorante. Almuerzo: 1 porción de ensalada verde; 200 gramos de filete de res, 1 fruta. Merienda: café, té o mate, con edulcorante; 100 gramos de jamón desgrasado o queso descremado. Media tarde: 1 vaso de 1/2 limón exprimido, con edulcorante. Cena: 1 plato de ensalada de verduras; 1 porción de carne vacuna magra (a la plancha).

 

Indicaciones generales

- Beber un vaso de zumo de limón exprimido, con edulcorante, una hora antes de comer (se pueden incluir ralladuras).

- Tomar una taza de caldo (puede ser con una clara de huevo), 20 minutos antes de la comida.

- A lo largo del día, se deben beber alrededor de 2 litros de agua.

- No consumir más de un alimento concentrado a la vez.

- No combinar proteínas diferentes, o hacerlo en pequeñas cantidades.

- Los vegetales deben combinarse lo menos posible entre sí.

- La verdura verde debe comerse lentamente.

 

(Por supuesto, un menú totalmente adaptado a cada persona sólo puede ser diseñado por especialistas en la dieta neurobiológica.)