Cómo es la dieta del mango africano, primera parte
La dieta del mango africano (Irvingia gabonensis) es un novedoso régimen para adelgazar que aprovecha las benéficas propiedades de esta fruta, muy rica en nutrientes y antioxidantes.
Entre las numerosas propiedades del mango africano, se destaca que es abundante en fibra, vitamina A y vitamina C. También contiene vitaminas del grupo B, entre las que sobresale la niacina (conocida como vitamina B3), que tiene un rol muy importante en el metabolismo de las grasas. Precisamente este es el motivo por el que el mango africano se ha convertido en una fruta de moda para incluir en dietas de adelgazamiento. Además, como el extracto de mango africano es totalmente natural y no posee ningún estimulante, puede ser consumido por cualquier persona. Esta fruta exótica se encuentra, sobre todo, en Camerún, África. Es un fenómeno nuevo y ya muy extendido en los mercados de Estados Unidos, México y otros países, pero los africanos la han usado, junto con sus semillas, durante cientos de años; afirman que el fruto, así como el extracto, tienen beneficios para la salud, mucho más allá de sus propiedades para bajar de peso. Ya se han llevado a cabo algunos estudios clínicos que demuestran, de forma bastante convincente, las propiedades saludables en general, y adelgazantes en particular, del mango africano. Según estos estudios, el mango africano ayuda a bajar los niveles de colesterol LDL (“colesterol malo”). Se sabe que disminuir el LDL y aumentar el HDL (“colesterol bueno”) prolonga la esperanza de vida, entre otras cosas por favorecer la salud cardiovascular. El mango ayudaría a reducir los niveles de colesterol malo por medio de la unión a ácidos biliares y la eliminación a través de movimientos intestinales diarios. Por un lado, los antioxidantes del mango africano acentúan la pérdida de peso. Por otro, el mango tiene propiedades que lo convierten en un supresor natural del apetito. Pero hay mucho más…
Ver también: Cómo es la dieta del mango africano, segunda parte