La dieta Forking

Este régimen se caracteriza por utilizar para comer sólo el tenedor y aplicar el viejo principio de “desayunar como un rey, almorzar como un príncipe y cenar como un mendigo”.

Presentamos sugerencias (sólo a título indicativo) para cada una de estas instancias alimenticias.

Desayuno

– 2 huevos, jamón y 2 rebanadas de tostadas de trigo entero, con mantequilla.

– 2 rebanadas de tostadas de trigo entero, con queso o mantequilla de maní.

– Cereales, yogur, frutas y miel.

– Avena con uvas pasas.

Almuerzo

– Bistec con papas.

– Pollo con arroz y vegetales.

– Plato de pastas.

– Una tortilla, ensalada y papas fritas.

– Sopa y un emparedado alto en proteínas.

– Una ensalada con un emparedado o una hamburguesa.

Postre: yogur, fruta o ensalada de fruta; o una pequeña porción de pastel, torta o helado.

Cena

Vegetales: espárragos, frijoles, brócoli, coles de Bruselas; zanahorias, lentejas, champiñones, cebollas; arvejas, papas, ensaladas de espinaca y soja.

Granos: pastas, arroz (preferiblemente, integral), sémola, trigo burgol, quinoa.

Pescados: arenque, salmón, atún, anguila, carpa, sardina, trucha, rodaballo, lenguado.

La cena exige cuidados especiales; es la comida clave, porque la noche es cuando el organismo fija más las calorías. En la cena, es imprescindible consumir menos cantidades de alimentos, y que sean rigurosamente de aquellos que sólo podamos tomar con el tenedor. En general, los alimentos preferidos por la dieta Forking son similares a los de la famosa dieta mediterránea: legumbres, cereales, verduras, etc.

En cambio, los alimentos prohibidos incluyen: canapés, aceitunas, galletas de aperitivo, pan, patatas fritas, embutidos, mariscos, frutas, dulces, chocolate; sopa, huevo pasado por agua, yogures, cereales, ensalada, compota, tartas dulces, helados; queso untable, mantequilla, margarina, mermelada, miel, paté; carne, pollo, queso, pizza, tartas saladas, frutas que se pelen.